Querida yo:
Recuerda ser siempre tu prioridad número uno.
Recuerda que eres un ser completo no a medias, por eso necesitas trabajar en ti en todos los niveles de tu ser: mental, físico, emocional y espiritualmente.
Cuidar de ti es un trabajo diario en donde te valoras en todos los aspectos y áreas de tu vida, como mantener limpio tu espacio personal, tu casa, cuidar de tu dinero, de no malgastarlo. Es también , observarte y escucharte interiormente en las decisiones y acciones de tu vida.
En el nivel mental nunca dejes de aprender nuevas cosas, estimula tu creatividad, invierte también en tu desarrollo personal, continúa creciendo, trabajando en ti misma a tu propio ritmo. No te desesperes, cada persona tiene sus tiempos. Ámate así tal como eres con tus errores y defectos.
En el nivel físico, cuida de tu cuerpo y salud. Haz ejercicio. Cuida los alimentos que comes, observa de qué manera te nutres, hay comidas que nos enferman y otras nos dan energía, evita enlatados, refrescos, y comida procesada, tampoco es necesario llevar una dieta estricta, pero podemos comer de todo con moderación y medida. Sé que te he descuidado un poco últimamente, pero me comprometo a mejorar mis hábitos.
En el nivel emocional cuida de tus relaciones personales, rodéate de personas que te aprecien, que te valoren. Rodéate de relaciones sanas, sé amable con las personas que conozcas, reconoce lo bueno de cada una y también lo malo; aprende de eso y si es necesario aléjate de ellas, no dejes que nadie ni nada afecte tu paz interior. Tú tienes el control, nadie puede dañarte sin tu permiso, aprende a decir que no sin sentirte mal. Deja ir a las personas que sientes no te hacen un bien, envíales luz y sigue adelante.
En el nivel espiritual toma conciencia de lo que te estresa, sobre las preocupaciones, pensamientos y te invito a meditar, rezar, contemplar la naturaleza o escribir un diario. Pasa tiempo a solas para escuchar a tu verdadero ser.
Nuestras células escuchan lo que dices, así que repite las siguientes frases las veces que quieras.
- Me amo tal como soy.
- Es mi intención respetarme y amarme a mí misma en toda ocasión.
Recuerda tienes que dar amor para recibirlo y para eso tienes que cultivar el amor propio.
Date permiso de escuchar tus sentimientos y a tu cuerpo; de respetarte, amarte y valorarte. Elige esta decisión todos los días para que puedas cuidar de ti misma.
Debe estar conectado para enviar un comentario.